Iniciamos la segunda etapa de la Propuesta Pastoral con la esperanza de seguir caminando con Don Bosco en este año del Bicentenario de su nacimiento y ésta vez lo haremos a través de la experiencia significativa: la pedagogía de los gestos, la cual se hace evidente en la segunda parte del sueño de los 9 años, correspondiente a esta etapa.
Es significativo los gestos que aparecen en esta segunda parte del sueño: aturdido y espantado, lo conduce de la mano, le muestra el camino, le pone la mano en la cabeza… se trata de una comunicación no verbal pero cargada de una cantidad de mensajes correspondientes al estilo, a la manera como Juanito Bosco debe cumplir la misión encomendada.
La propuesta del mes de mayo se vivirá bajo DOS EXPERIENCIAS BÁSICAS:
Ain Karim: María que hace el mejor servicio a Don Bosco, enseñándole el camino para cumplir el sueño de Dios sobre su vida… Y María que hace posible que Dios habite nuestros sueños. María sirve la vida y María le Sirve a la VIDA.
Belén: María que acompaña el nacimiento de Jesús en nuestros corazones. Ella cuida la vida de Jesús que se gesta en nuestra vida por la escucha de la Palabra.
Ain Karim, traduce “Fuente del Viñedo”. Es un pueblecito situado en las cercanías de Jerusalén, a unos 6 kilómetros de la Puerta de Jaffa. En este pueblo es donde la tradición ha venido recordando dos hechos relatados en el evangelio de San Lucas: la Visitación de María a su prima Isabel y el nacimiento de Juan Bautista.
No se puede llegar al Belén del nacimiento de Jesús, sin haber pasado antes por Ain-Karim. Sin esta peregrinación de María, sin este encuentro bendito de mujeres, no podría haberse dado la redención cristiana, como misterio “carnal”, de mujeres que creen y que están al servicio y al cuidado de la Vida.
Éste fue el camino de María, el más duro y arriesgado de todos los caminos, para una jovencita embarazada, una tierra de pobres, de caminantes… pero también de gente buena, que con seguridad acompañó a María, la muchacha, desde Galilea hasta Jerusalén; porque eran muchos entonces los que hacían el camino, compartiendo la marcha y el pan, la manta para resguardarse del frío de la noche, con la conversación llena de esperanza, de vida. Por eso es importante tener siempre presente, que para llegar a Belén hay que pasar por Ain-Karim, como lo hizo María.
Maín, fue una mujer que desde adolescente se preocupaba por los pequeños y pobres, esto se asemejaba a lo que Don Bosco vivía en Valdocco.
Maín salía a la búsqueda, como el Buen Pastor, su preocupación por salir al encuentro de las necesidades de las niñas de Mornés, de las que frecuentan los festejos del carnaval, de las que asisten al catecismo, de las que se han quedado huérfanas..., nos revela que en su corazón estaba viva la "búsqueda del buen pastor".
Domingo Savio en su corta vida nos dejó un rastro, una huella, una ESTELA DE SANTIDAD.
Te invitamos a que te comprometas como joven salesiano en la conquista de tu santidad.